La entidad que realiza una campaña sobre el comportamiento de estos cetáceos en aguas de General Alvarado y zonas aledañas terminó una nueva etapa del proyecto. Durante septiembre hubo mayor presencia de especímenes a diferencia del año pasado.
MIRAMAR (Corresponsal).- Fundación Cethus concluyó una nueva temporada de trabajo en Miramar a través del proyecto “Conservación y estudio de la Ballena franca austral (Eubalaena australis) en aguas del municipio de General Alvarado y zonas aledañas, provincia de Buenos Aires”, el cual se inició a partir del interés de las autoridades comunales ante la presencia de estos cetáceos en sus costas y la posibilidad de realizar la actividad de avistaje responsable.
Si bien los resultados de los estudios científicos se conocerán oficialmente más adelante, uno de los datos de interés que surgieron fue que “durante septiembre se vio una mayor cantidad de ejemplares que el año pasado”.
Cabe señalar que durante 2013 comenzaron los primeros trabajos de investigación y un año después se firmó un convenio de colaboración con el gobierno municipal.
Desde entonces se lleva a cabo un trabajo científico sistemático orientado a recolectar la información necesaria y fundamental para conocer con rigor la estacionalidad y el uso de hábitat de las ballenas francas australes en esta zona costera bonaerense.
A partir de la realización de esfuerzos de muestreo durante dos años completos, pudo determinarse cuál es la mejor época para avistarlas desde Miramar. “Nuestros datos indican que los avistajes comienzan a ser más frecuentes desde julio y declinan en octubre, ocurriendo el 85% de los mismos entre agosto y septiembre. La información recopilada también incluye número y composición de grupos, clase etaria, posicionamiento geográfico preciso de los ejemplares, y sus comportamientos”, informaron fuentes investigativas a LA CAPITAL.
Sumado a esto, para conocer aún mejor estas ballenas, fue ideado el primer catálogo de la especie para la provincia de Buenos Aires ya que con imágenes del patrón de callosidades presente en la cabeza de las ballenas pueden identificarse individualmente.
“Esas fotografías son tomadas gracias a los sobrevuelos en helicóptero realizados con el apoyo de la Prefectura Naval Argentina, que abarcan el área costera desde Mar del Plata hasta Necochea. Ya llevamos realizados cuatro procedimientos de estas características y nuestro archivo sigue creciendo gracias también a la incorporación este año de un dron y a distintas personas que gentilmente dan su aporte con fotos y videos aéreos”, sostuvieron desde la fundación.
“Al tener la foto-identificación, la capacidad de diferenciar individuos permite detectar a las ballenas en diferentes momentos de su vida obteniendo de esta manera valiosísima información biológica y ecológica de manera no invasiva”, agregaron.
Programa educativo
Además de los trabajos de investigación, Cethus cuenta con un programa educativo, orientado a instituciones de distintos niveles.
Desde 2018, diferentes colegios que participaron del mismo pusieron nombre a las ballenas identificadas en el catálogo y recibieron una imagen de ese ejemplar para colgar en la institución. Sumado a esto se dictan capacitaciones sobre el avistaje responsable de cetáceos y charlas destinadas a la comunidad en general.
“Paralelamente se creó el grupo de Facebook: Ballenas en Miramar, con el objetivo de compartir avistajes de la especie en tiempo real”, indicaron científicos que trabajan en el proyecto.
La investigación recibe el apoyo de la Secretaría de Turismo de General Alvarado, Prefectura Naval Argentina, administración y consorcio del edificio Playa Club. También se lleva a cabo en colaboración con Whale and Dolphin Conservation e IBM y con subsidios de The Rufford Foundation y Kilverstone Wildlife Charitable Trust.